Utopía Hedonista

Utopía Hedonista es una instalación basada en el análisis del video de la canción She's Bad de DyE, y dirigido por Dent de Cuir.

Utopía Hedonista is an installation based on the analysis of the video of the song She's Bad by DyE, and directed by Dent de Cuir.

MANUAL ANÁLISIS VIDEO

CONCEPTO MONTAJE

El amor líquido, es un concepto utilizado por el sociólogo Zygmund Bauman, para describir la forma en la que se han establecido los lazos entre seres humanos tras la posmodernidad, donde la noción de “líquido”, hace referencia a que, en nuestra sociedad, la mayoría de los aspectos de la vida son inconsistentes, evanescentes y efímeros. La vida actualmente, se caracteriza por ser extremadamente pasajera, acelerada, donde las cosas no tienen el tiempo suficiente para solidificarse o echar raíces. (Bauman, 2003, pg. 68).

En el mundo que Bauman describe, varios ámbitos de nuestra existencia se ven banalizados y mercantilizados, siendo uno de estos es el amor. Hemos olvidado y rechazado el amor romántico, pues nos encontramos en una época donde reina la individualidad, y las relaciones perdurables son vistas como una pérdida de la libertad. En nuestra coyuntura las emociones, también son algo desechable, que queremos utilizar cuando nos plazca y tirar cuando nos incomodan. Nos da igual quienes son los que nos llevan a sentir, no importa con quienes nos relacionamos, solo importa la propia satisfacción, algo que nos ha llevado a buscar compañeros amorosos y sensaciones placenteras, de la misma forma en que buscamos el mejor producto para comprar. El romance, se ha vuelto una práctica consumista y estamos cegados por una constante necesidad de tener más. Coleccionamos parejas con orgullo, de la misma manera en que coleccionamos numerosos objetos, donde lo relevante es la presentación, los atributos físicos y el beneficio que dichas parejas pueden aportarnos.

Todos hemos optado por un estilo de vida hedonista, en el que constantemente estamos tratando de tener momentos de placer, pero que no dejen de ser eso, simples momentos que no interfieran con nuestra identidad individual. El hedonismo actualmente está caracterizado por el utilitarismo, por la sensualidad, el materialismo y el capitalismo. Si bien se conserva el principio de satisfacer los deseos, esta filosofía también se asocia con la posesión de objetos materiales, con la acumulación. Por lo tanto, el poder adquirir relaciones, sentimientos, personas y sensaciones, al igual que adquirimos cualquier artículo, es el mundo ideal de los hedonistas contemporáneos. Nos hemos convertido en compradores compulsivos, cegados por nuestro instinto reproductivo, pero además de esto, nuestro contexto y muchas de nuestras prácticas nos han hecho soñar con poder comprar todos y cada uno de los aspectos de lo que nos hace ser humanos.

Nos disfrazamos con atributos falsos y superficiales para conquistar, para establecer vínculos basados en apariencias y cuyo objetivo no es más que obtener instantes satisfactorios. Hemos mercantilizado todos y cada uno de los aspectos de nuestra vida y nuestra humanidad, al sumergirnos en un sueño perfecto, aparentemente lleno de placer, en la máxima utopía hedonista, pero que sin saber, se puede convertir en una pesadilla que al final nos deja vacíos.

Liquid love is a concept used by the sociologist Zygmund Bauman to describe the way in which ties between human beings have been established after post-modernity, where the notion of "liquid" refers to the fact that, in our society, most aspects of life are inconsistent, evanescent and ephemeral. Life today is characterized by being extremely transient, accelerated, where things do not have enough time to solidify or take root. (Bauman, 2003, page 68).

In the world that Bauman describes, several areas of our existence are banalized and commodified, one of which is love. We have forgotten and rejected romantic love, because we are in a time where individuality reigns, and lasting relationships are seen as a loss of freedom. In our conjuncture, emotions are also something disposable, that we want to use when we like and throw when we are uncomfortable. We do not care who are the ones who make us feel, no matter who we relate to, only our own satisfaction matters, something that has led us to look for loving companions and pleasant sensations, in the same way that we look for the best product to buy . Romance has become a consumerist practice and we are blinded by a constant need to have more. We collect couples with pride, in the same way that we collect numerous objects, where what is relevant is the presentation, the physical attributes and the benefit that these couples can give us.

We have all opted for a hedonistic lifestyle, in which we are constantly trying to have moments of pleasure, but not stop being that, simple moments that do not interfere with our individual identity. Hedonism is currently characterized by utilitarianism, by sensuality, materialism and capitalism. While the principle of satisfying desires is retained, this philosophy is also associated with the possession of material objects, with accumulation. Therefore, the power to acquire relationships, feelings, people and sensations, just like we acquire any article, is the ideal world of contemporary hedonists. We have become compulsive buyers, blinded by our reproductive instincts, but in addition to this, our context and many of our practices have made us dream of being able to buy each and every one of the aspects of what makes us human.

We disguise ourselves with false and superficial attributes to conquer, to establish links based on appearances and whose objective is nothing more than to obtain satisfactory moments. We have commodified each and every aspect of our life and our humanity, immersing ourselves in a perfect dream, apparently full of pleasure, in the maximum hedonistic utopia, but without knowing it, it can turn into a nightmare that ultimately leaves us empty.