Una historia a crisis y esplendores fueron construyendo escenario a una identidad portuaria sobre el Paraná. Sometido al interés de una economía que se solvento de un modelo agro exportador y aun sigue solventándose de extracciones productivas ahora ligadas a la soja transgénica que se expande obedeciendo a estrategias de empresas globales como Cargill, Bunge y Dreyfus, que junto a grupos económicos nacionales han tomado la soberanía sobre lo que se produce y al cuerpo de agua como valor económico transformando su composición natural para ensanche de la misma ruta fluvial.
Un río que perdió su nombre, el paisaje y la soberanía sobre su territorio fue y es saboteada por un sistema construido a base de una ausencia de las decisiones estatales y el negocio de un recurso que sigue expandiéndose por la economía empresarial.
¿Cómo devolver el paisaje a un territorio conquistado?
¿Cómo devolver el paisaje a un territorio conquistado?
